Resérvame un billete en tu mirada
alguna dulce caricia en tus manos
y todos esos susurros livianos
que en mis mejillas, tu voz dibujada...
.
Guárdalos bajo llaves y cerrojos
como si fueran gestos artesanos,
esperando alcanzar mis altozanos,
sin que medien prudencia ni sonrojos...
.
No tengas prisa, hoy llegará la noche
mucho antes de lo que quizá suponías
cuando llamaste a mi puerta aun cerrada…
Prometo sumar, locura y derroche.
El deseo no entiende de horas vacías
ni de piel a su suerte abandonada…
alguna dulce caricia en tus manos
y todos esos susurros livianos
que en mis mejillas, tu voz dibujada...
.
Guárdalos bajo llaves y cerrojos
como si fueran gestos artesanos,
esperando alcanzar mis altozanos,
sin que medien prudencia ni sonrojos...
.
No tengas prisa, hoy llegará la noche
mucho antes de lo que quizá suponías
cuando llamaste a mi puerta aun cerrada…
Prometo sumar, locura y derroche.
El deseo no entiende de horas vacías
ni de piel a su suerte abandonada…
.
Elizabetta Puig®
Ilustración: Callejón junto a la calle Cardenal González (Córdoba)
Derechos Reservados
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